Romina :
es
una mujer fuera de lo común. Es un personaje excesivo en todo: su
política es, en cierto modo, la del todo o nada. Por eso, su
itinerario podría conducirla hacia altas cumbres, como hacia ciertos
abismos… Todo la empuja hacia los demás, hacia el mundo o hacia el
público. De una u otra manera, Romina no deja a nadie
indiferente y puede llegar muy lejos, si siente que los demás la
miran. Es un personaje fuera de lo común, que no sigue los caminos
trillados y no conoce las fronteras. Romina se apasiona por
el más allá, ya sea geográfico, intelectual o espiritual. Busca
superarse, ir más allá de sus límites, de sus costumbres. Esto a
menudo hace que sea difícil de entender, y corre el riesgo de que la
tomen por una iluminada o una marginal. Muy a menudo,Romina se
ve tentada por los contactos con el público, el extranjero, durante
sus viajes o desplazamientos, el altruismo, las orientaciones
humanitarias o filantrópicas. Es bastante probable que pase por
diferentes fases antes de lograr el desapego perfecto. Tendrá que
alcanzar una seguridad absoluta en el plano material antes de
dedicarse a los demás, ya que Romina no se encuentra al
abrigo de cuestionamientos. Necesita tener fe en lo que hace, e
incluso podría acceder a una cierta notoriedad o a otra forma de
reconocimiento. Su tendencia a fantasear, su rica sensorialidad, su
búsqueda de lo absoluto pueden, si no se materializan, llevarla
hacia paraísos artificiales. De niña, Romina es
hipersensible, emotiva, caprichosa, y habrá que comprenderla y
amarla, aunque su apreciación de la verdad parezca extraña, o si
sus historias rocambolescas choquen.
¿Qué
le gusta?
Las grandes causas, las grandes
ideas, los valores humanos o espirituales. Romina a menudo
ve las cosas a lo grande, ya que su ideal es ilimitado. Sus gustos la
llevan hacia lo inaccesible, el misterio, la religión, lo oculto, la
psicología, la política, la arqueología… En la vida cotidiana,
es difícil de captar y de seguir, ya que su corazón es, a la imagen
de su ideal, inmenso: Romina es novelesca y sus historias
sentimentales a menudo son peligrosas. Tampoco corresponde
precisamente al ama de casa perfecta. A menudo poco ordenada,
fantasiosa, le da más lugar a las emociones, las sensaciones, los
ambientes, que a sus deberes u obligaciones.